Yoga
El ritmo de vida en el que vivimos en la actualidad genera mucho desgaste y estrés. Hoy en día es muy difícil compaginar el trabajo, los hijos, los compromisos sociales y sacar tiempo libre para uno mismo/a. La desconexión con el entorno es fundamental para despejar la mente, ayuda a la concentración y te libera de las presiones mentales a la que estamos sometidos/as en nuestro día a día. Es por eso que, en estos últimos años, el Yoga ha ido ganando adeptos en busca de la relajación física y mental convirtiéndose para muchos en la práctica favorita para meditar y desconectar cuerpo y mente.
Se estima que el Yoga tiene más de 5.000 años de antigüedad, según los textos más antiguos de la literatura india, provenientes de la religión védica, que fue previa a la hinduista.
Consiste en un conjunto de disciplinas y prácticas cuya premisa es aunar el cuerpo y la mente, con el objetivo de llegar a un equilibrio absoluto en nuestro estado anímico.
La palabra Yoga tiene, según los textos, dos significados:
- Unión.
- Métodos para llegar dicha unión.
Es decir, utilizando el Yoga con los métodos apropiados se llega a la expresión más propia de nuestro ser. Esta filosofía, aplicable a todos los aspectos de la vida, nos enseña cómo tratar a los demás y al entorno que nos rodea.
¿Qué es mejor, Yoga o Pilates?
No hay que confundir “el ser” con “el estar”, y por lo tanto tampoco el Yoga con el Pilates.
Mucha gente confunde estas dos disciplinas ya que en algunos aspectos son similares pero en otros muy diferentes.
Como puntos en común, las dos se pueden realizar en cualquier lugar, solo necesitas una esterilla o colchoneta. Teniendo en cuenta que en el Yoga necesitaras una base que se adhiera más al suelo, debido a los movimientos en los que se está de pie y el Pilates una un poco más gruesa para los movimientos en el suelo.
Ambas son técnicas suaves y de poco impacto para el cuerpo; nos ayudan a corregir nuestra postura corporal; trabajan la parte central del cuerpo o core; mejora la flexibilidad y la movilidad articular de nuestros músculos. Además, hay diferente variantes en cualquiera de las dos técnicas, dependiendo del objetivo que estemos buscando.
Una de las diferencias entre las disciplinas es su origen; el Yoga es una filosofía milenaria de la India y el Pilates, como explicamos en el anterior blog, se origino en el siglo XX.
Como estamos viendo, el enfoque es totalmente diferente. El Yoga se convierte en una forma de vida representada en los ejercicios y se le suma un componente espiritual que te ayuda en tu día a día. El Pilates en cambio, el componente mental es trasladado al cuerpo: equilibrio, respiración, concentración y precisión.
En cuanto a los objetivos, el Yoga se centra en la relajación y la paz de espíritu, mientras que el Pilates se basa en mejorar el tono muscular y fortalecer el cuerpo.
Si hablamos de su técnica, en Pilates las posturas van desde el centro del cuerpo hacia los extremos, en cambio en el Yoga, empieza en las extremidades para acabar en el centro; y en la respiración también es diferente; en Pilates es torácica y en Yoga es abdominal.
Como conclusión, sí que se puede considerar al Yoga una práctica más trascendental, ya que tratándose de una filosofía, consigue calar más en nuestra persona. No hay una técnica mejor que la otra, simplemente hay que tener claro qué estamos buscando y qué se quiere conseguir para acudir a una u otra disciplina.